Como padre, puede ser difícil saber cuándo los problemas de vejiga de su hijo necesitan atención médica. Por ejemplo, ¿la enuresis nocturna de su hijo es solo una fase o un signo de algo más serio? ¿Cuándo son las infecciones del tracto urinario de su hija algo de qué preocuparse?
Un urólogo pediátrico puede ayudar a los padres a resolver estas preguntas.
Estas son algunas de las razones más comunes por las que los padres buscan atención para sus hijos.
Mojar la cama y problemas de vejiga
El entrenamiento para ir al baño no siempre es fácil. Cuando las cosas no salen bien, ¿cómo sabe si su hijo tiene un problema médico o simplemente es un desarrollo tardío?
Cada niño es diferente. Pero como regla general, si su hijo o hija no se mantiene seco durante la noche a los seis años, es posible que desee consultar con un urólogo pediátrico. También debe consultar a un especialista si su hijo repentinamente tiene nuevos problemas urinarios de día o de noche después de haber aprendido a ir al baño previamente.
Hay muchas razones por las que puede ocurrir la incontinencia urinaria, debido al estrés de un cambio de vida, como la pandemia, una mudanza reciente o un nuevo miembro de la familia, o incluso una infección del tracto urinario reciente o recurrente.
Puede que no haya ningún problema en absoluto, pero puede ser tranquilizador descartar cualquier diagnóstico grave.
Infecciones del tracto urinario en niños
Una infección del tracto urinario (ITU), que puede afectar a bebés y niños de ambos sexos, puede ser tratada por un pediatra. Pero cuando su hijo ha experimentado múltiples infecciones urinarias, puede ser el momento de ver a un urólogo pediátrico.
Las infecciones recurrentes del tracto urinario pueden ser una señal de que algo más está pasando. Por ejemplo, su hijo puede tener una anomalía anatómica que contribuya a las infecciones. También es común que los niños con infecciones urinarias recurrentes tengan algún tipo de comportamiento anómalo, también conocido como disfunción miccional.
Esto a menudo se asocia con pérdidas de orina o accidentes, y los niños también pueden tener problemas con la función intestinal. La disfunción miccional no está necesariamente bajo el control voluntario y consciente del niño. Sin embargo, es importante identificar y tratar la afección, que puede ser muy frustrante tanto para los pacientes como para sus padres.
Problemas congénitos
Los urólogos pediátricos también realizan cirugías para tratar una amplia gama de defectos congénitos que involucran órganos internos del cuerpo, como los riñones, la vejiga y los órganos reproductivos, y problemas con los genitales en niños y niñas.
Los principales objetivos quirúrgicos incluyen permitir que un niño logre o mantenga la función urológica (es decir, renal y genital/sexual), con un enfoque adicional en brindar el mejor resultado cosmético posible.
Cuidando a bebés pequeños, niños, bebés y adolescentes
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